Las cosas que vives te llevan a ser quien eres. Cada acontecimiento de la vida te lleva a otro, y ese a otro, y de ese modo se construye una vida, una identidad, una persona, quien realmente somos. Olvidarlo significa eliminar una parte de nuestro ser. Es como volver en el tiempo, solo que simplemente ya no encajamos, no del modo que era antes.
El miedo a olvidar es el miedo más grande que tengo. Todo lo que he vivido en mi vida se ha transformado en un gran collage, en una obra de arte que me recuerda día a día quien soy y qué es lo que quiero de mi vida. Si lo olvidara todo ya no sabría que hacer.
Volver mi mente atrás podría significar tomar un nuevo camino que me lleve a un lugar mejor, o cometer los mismos errores, tropezar nuevamente con las mismas piedras. Todos nos merecemos una segunda oportunidad, pero no creo que sea justo olvidar quienes somos, por que de ese modo sería una primera oportunidad.
Olvidar significaría que salgan de mi mente cosas tristes que en algún momento pudieron haberme hecho infeliz, pero también olvidar significaría perder todos esos bellos momentos que llenan mi día a día, las pequeñas alegrías, los pequeños logros, los sueños que me llevan a volar.
Olvidar sería no volver a ser yo.
Inspirado en la película The Vow
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