Mi sueño ideal

Nuevos sueños se abren paso en mi mente. En ellos me encuentro viajando alrededor del mundo, entregándole a las personas de cada lugar una parte de mi. Ya sea por la música, el baila, o algo de ayuda comunitaria. ¿No seria bello que todos pusieran su granito de arena para que este mundo sea un lugar mejor? Si cada uno aportara un poco de sus habilidades y fuerzas estoy segura de que se lograrían grandes cosas.
Un poco de alegría, un poco de habilidad para los negocios, un poco de conocimientos de medicina, un poco de habilidad culinaria, algo de habilidad para defender los derechos de los demás; con un poco de esas habilidades y otras más, si cada un aportara su granito ¿se imaginan de lo que seriamos capaces? Somos más de 7 mil millones de habitantes, 7 mil millones de habitantes con algo especial que podríamos entregar a los demás.
En mi mundo soñado esos 7 mil millones de habitantes se unen para mejorar el lugar donde vivimos y juntos construir un mundo mejor.
Pero claramente 7 mil millones de personas es muy difícil que se unan. Lamentablemente el presente está lleno de personas individualistas, que velan solamente por sus propios intereses, olvidándose de que algún día ellos podrían necesitar de la ayuda que podrían brindar a los demás. El hoy está lleno de ambición, avaricia, arrogancia, egoísmo, mentiras, deslealtad, terror, tristeza, poder mal utilizado. Como me gustaría decir que el mundo de hoy está lleno de cosas como la caridad, alegría, verdad, que el poder se utiliza para generar cosas buenas y no perseguir los fines personales. Sin lugar a dudas hay cosas buenas, pero se ven disminuidas ante tanta maldad. ¡Hagamos que prime lo positivo!
Para finalizar, les hago una invitación (si es que alguien lee esto). Los invito a poner su granito de arena. Partamos por lo más básico, la alegría. ¿saben el poder de una sonrisa? una sonrisa, aunque sea de un desconocido, puede alegrarle el día a alguien, brindarle esperanza y fe en el futuro. Les propongo que caminen por la calle sonriendo, al menos un minuto. Se darán cuenta de que la gente los verá como locos, ¿pero qué más da? ser feliz no es un pecado.
Como última invitación, los incito a buscar alguna causa que lo motive, algo de lo que quieran ser parte. Hay muchas ONG en el mundo, muchas causas que necesitan a un soldado más. Formemos un ejército, el ejercito del bienestar, de la felicidad. La unión hace la fuerza, seamos la fuerza del cambio.