Parecía ser un día común y corriente. Me levanté, tomé desayuno junto a mi madre, me fui a la escuela. Era la típica rutina que dominaba mi vida desde que tenía memoria. Las cosas estaba igual que siempre, pero algo se sentía distinto, algo que no pude identificar. Me sentía ajena a este mundo, como si fuera una realidad paralela. Sentía que estaba dentro de una película, yo era un expectadora más. Al llegar la noche lo comprendí. Fueron esos besos, esos abrazos y caricias. Fueron esas miradas largas e intensas, llenas de emociones silenciosas que llenaban nuestros corazones. Fue todo eso lo que me hacía sentir distinto. Aquel día hice todo como de costumbre, pero la esperanza de verte al día siguiente lo hacía todo distinto.
Habían pasado seis meses ya desde que partiste tu viaje. Al principio había sido duro, dejar de verte de un día para otro me causó una ansiedad increíble. Me costaba dormir por las noches, durante el día lo único que hacía era pensar en tí. Cada canción que escuchaba me recordaba tu nombre y las tardes que pasamos juntos. Con cada respiración intentaba llenar el vacío que dejaste con tu partida. Pero al mismo tiempo, con cada respiración me acostumbraba a la idea de la distancia y comprendía que cada instante, cada segundo, era uno menos para estar nuevamente a tu lado.
Me parecía increíble que en menos de 24 horas pudiera abrazarte una vez más, pudiera mirar nuevamente esos ojos y sentir las lágrimas corriendo por mi rostro, pero esta vez iban a ser lágrimas de felicidad.
Más acerca de mi.
Cuando no tienes claros tus pensamientos una buena forma de poder ponerlos en orden es escribiéndolos. Cada una de las cosas que leerán en este blog proviene de mis vivencias y las de mi gente cercana, hechos que causan en mi los más diversos sentimientos. Los invito a uds. lectores a sumergirse en este mundo de emociones, sueños y anhelos. Bienvenidos a mi mundo, un mundo donde todo puede ser posible y donde prima la mágia del amor.
PD: Mis palabras nos siguen una estructura establecida, es solo lo que sale de mi mente mientras escribo. No hay reglas de puntuación ni nada. Caos, así como esta vida en la que estamos. Enjoy
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